Al mal tiempo, buen cine...

Queridos lectores y seguidores:

Me permito escribir una líneas para agradeceros a todos (desde todas las partes del mundo) que visitéis mi blog y todo lo que voy publicando. Ante todo comentar que no estoy licenciada en cinematografía pero, doy gracias por haber asistido a cursos y que mis padres me introdujeran al cine con sólo 8 años.

Por eso os animo que escribáis vuestras opiniones sin vergüenza alguna (¡por eso existe la libertad de expresión!) o sugerir cambios o visionados de películas, ya que se convierte en un feedback donde podemos aprender unos de otros.

Para finalizar, gracias una vez más por vuestro tiempo y dedicárselo a mi blog. ¡Seguid disfrutando del cine!

miércoles, 31 de enero de 2018

Thelma y Louise (1991)




  • Dirección: Ridley Scott
  • Año: 1991
  • Género: Drama
  • Intérpretes: Susan Sarandon, Geena Dvis, Harvey Keitel, Michael Madse, Christopher McDonald, Brad Pitt.
  • Guión: Callie Khouri
  • Música: Hans Zimmer
  • Montaje: Tom Noble
  • Fotografía: Adrian Biddle
  • Productora: Metro Goldwyn Meyer.

SINOPSIS

Thelma (Geena Davis) es una anodina ama de casa cuyo marido machista y con complejo de superioridad, no está atento a Thelma. Por otro lado está Louise (Susan Sarandon) que vive una vida despreocupada y enloquecida y, anima a Thelma a irse un fin de semana juntas. Pero el viaje, no resultará ser como ellas esperaban.


CRITICA

Cuando Thelma y Louise se estrenó, creó un poco de controversia ya que en las famosas "road movies" estaban protagonizadas por hombres, siempre en situaciones conflictivas y que también eran atractivos para las mujeres que se encontraban. Por eso, esta película supuso un antes y un después no solo porque las protagonistas fueran mujeres, sino porque la historia trataba temas bastante espinosos para las mujeres y la sociedad miraba hacia otro lado (en la actualidad también pasa).

Los distintos temas que se tratan en la película, aunque al espectador le pueda parecer una historia aburrida, van desde la libertad, la violación, la emancipación, la autorealización y la transgresión de género. Todos estos temas generan una emoción ambivalente. Ya que a lo largo de toda la película se percibe por un lado la liberación total de las protagonistas o como la imposibilidad de escapar y como son víctimas de un sistema abusivo. Al tratar el tema de la libertad, se puede ver como las dos heroínas intentan escapar de la monotonía de sus vidas y para ello deciden planear un fin de semana para ellas solas. Al principio da la sensación de que solo quieren liberarse de manera temporal pero descubren que sus vidas es algo que no les permite respirar ni poder realizarse como personas. Sin embargo esa libertad será de corta duración y no será tan prometedora como se pinta siempre a América.

En cuanto al tema de la violación, es algo que está de forma omnipresente en la película. En la secuencia principal en la que gira en torno a toda la trama, ya que transforma una simple salida de dos amigas en una dramática huida a través del desierto de los Estados Unidos. Tras este acontecimiento empiezan a salir a relucir (aunque no de manera muy clara) algo que le debió ocurrir a Louise en su pasado y que le hace reaccionar de manera violenta.

Si nos fijamos ahora en la emancipación y la autorealización, vemos como ambas mujeres son sumisas a sus respectivas parejas y que tienen que vivir en base a unos cánones establecidos pero, al igual que los hombres ellas pueden actuar sin necesidad de tener que pedir permiso al marido o al novio y pueden autorealizarse con algún tipo de sueño o simplemente, que sus parejas las traten con respeto y ver un poco las necesidades que también necesitan. Tanto la emancipación como la autorealización se ven  de manera clara en el personaje de Thelma, que pasa de ser una modesta y tímida ama de casa a liberar a su yo interior.

El último tema importante de la película es el de la transgresión de los roles sexuales. Al hilo de la historia, las dos heroínas abandonan sus vestimentas femeninas para adoptar una apariencia más masculina. La transgresión de sexo se produce igualmente por su comportamiento: quedan fuera de la ley y adoptan gestos y actitudes viriles. La película invierte finalmente las relaciones de sexo en el espacio, presentando dos mujeres que se van a la "conquista del Oeste", mientras que los hombres las esperan en el hogar.

A pesar de que puede parecer una película aburrida que no muestra nada de dinamismo, desde un principio se muestra como realmente una mujer no tiene porque perder su identidad o tiene que dedicarse a unas tareas, si no es lo que quiere y que puede ser igual de válida que cualquier hombre. Por todo esto y por demostrar que de vez en cuando es necesario transgredir las normas, es una película que todo buen amante del cine, debe de ver al menos una vez en la vida



Calificación personal: 9


domingo, 28 de enero de 2018

Molly's game (2018)



  • Dirección: Aaron Sorkin
  • Año: 2018
  • Género: Drama
  • Intérpretes: Jessica Chastain, Idris Elba, Kevin Costner, Michael Cera, Graham Greene, Bill Camp, Samantha Isler, Jeremy Strong.
  • Guión: Aaron Sorkin
  • Música: Daniel Pemberton
  • Fotografía: Charlote Bruus Christensen
  • Vestuario: Susan Lyall
  • Productora: The entertainment one, Pascal Pictures, The Mark Gordon Company.


SINOPSIS

Tras perderse los Juegos Olímpicos, Molly Bloom (Jessica Chastian) con 21 años se fue a vivir a Los Ángeles donde trabajó de camarera para, poco después ganar millones de dólares en el mundo del póker, gracias a sus dotes empresariales e inteligencia.


CRITICA

Una historia real siempre tiene dos formas de adaptarse a la gran pantalla: creando una película interesante que pueda atrapar al espectador, o bien creando una historia demasiado tediosa en la cuál el espectador se acabe perdiendo y no acabe sacando nada en claro. En el caso de Molly's game, tiene un sello de identidad propio generando expectación desde la voz en off hasta cada uno de los planos.


Desde el primer momento, la historia mete de lleno al espectador en la trama, no solo por la elocuencia de los diálogos, sino también por las explicaciones que hace en torno al póker y así permitir que uno se mimetice como si estuviese jugando una partida. Aunque, si bien es cierto que lo más atractivo es el poder de una mujer que se supo mover entre un gran número de gente rica y saber gestionar todas las ganancias y las partidas.

Puesto que en un movimiento poco habitual en Hollywood la historia está al servicio de un personaje femenino complejo y potente que se define por su talento profesional y llena toda una película sin tener que apelar al romanticismo. Porque desde el primer momento muestra a una mujer que renuncia a todo (sexo, dinero, mafia...) para que ella pueda tener el control. Esto, acompañado de un estilo narrativo sólido donde detalla de una forma clara el camino al ascenso y la posterior caída de Molly Bloom.

Por otro lado, refleja el mundo lucrativo de las partidas de póker entre la gente más rica de Hollywood y también con gente sin tantas posibilidades económicas que su adicción al juego les produce una total pérdida de conocimiento del espacio temporal y, el simple hecho de que se muestren las miserias del ser humano a través de un juego (pérdida de dinero, emborracharse, no poner límite a su codicia...) demuestra lo apegados que estamos a la riqueza para seguir acumulando más y que no importe perder.

El director Aaron Sorkin, que también es el guionista, crea una atmósfera donde todos los actores desempeñan un papel que permiten al espectador conocer a la protagonista y como las cartas no son las verdaderas protagonistas. A medida que va avanzando la trama, se ve como el espectador trata de empatizar con ella al ver que la tratan como una delincuente (se podría decir que en realidad fue una, pero de poca monta) y como ante todo ella protege la vida personal de sus jugadores, puesto que ella solo era la gestora de "su propia empresa" no de la vida privada de los demás.

Tanto Jessica Chastain como Idris Elba crean entre ellos un careo constante que es totalmente creíble, donde ambos ponen las cartas sobre la mesa (nunca mejor dicho) para resolver una situación comprometedora y, aunque no lo parezca, ambos se intentan ayudar y que realmente los culpables, son lo que siguen en la calle. Es una pena que a Jessica Chastain no la hayan nominado al Oscar este año, porque hace un personaje contenido y con mucha frialdad. Por otro lado, Aaron Sorkin muestra su gran dialéctica en el guión como ya hizo con Algunos hombres bueno o La red social, donde la historia es lo realmente importante.

Por todo ello disfruten de una película vibrante, entretenida, con pequeñas dosis de humor así como u guión tan bien escrito, que le mantendrá pegado a la pantalla. Y donde las mujeres, saben jugar en un mundo donde los hombres se sienten amenazados por el papel femenino.


Calificación personal: 8






sábado, 27 de enero de 2018

Malas tierras (1973)



  • Título original: Badlands
  • Año: 1973
  • Género: Drama
  • Dirección: Terrence Malick
  • Intérpretes: Martin Sheen, Sissy Spacek, Warren Oates, Ramon Bieri, Alan Vint, John Carter, Bryan Montgomery.
  • Guión: Terrence Malick
  • Montaje: Robert Estrin
  • Música: George Tripton, James Taylor
  • Fotografía: Taj Fujimoto, Steven Larner, Brian Probyn.
  • Productora: Warner Bros. Pictures, Badlands Company, Jill Jakes Production.


SINOPSIS

Dakota del Sur, 1959. El rebelde Kit (Martin Sheen) decide cambiar su vida mediocre cuando conoce a la joven de 15 años Holly (Sissy Spacek). Pero un trágico accidente, ambos jóvenes acaban convirtiéndose en fugitivos.


CRITICA

Antes de que se estrenasen las películas El árbol de la vida o La delgada línea roja, Terrence Malick se introdujo en el cine con esta ópera prima en la cuál muestra a una pareja de jóvenes "niñatos" que se quieren poner el mundo por montera sin seguir ningún tipo de reglas o leyes o que simplemente pueden salir indemnes cuando cometen algún acto delictivo, o incluso justificar sus actos.


Desde un principio nos muestra a dos jóvenes, él está ya en la "edad adulta" mientras que ella sigue en la adolescencia y se enamora perdidamente del joven del que ve que todos sus actos están justificados y no pone reparo alguno a lo que el chico hace. Además, nos muestra a una joven que permanece impasible ante lo que está sucediendo y realmente no es que no sepa como reaccionar, sino que la forma en la que entra en la "edad adulta" es tan abrupta que no le permite una cierta capacidad de reacción.

 Por otro lado, la estética visual junto con la fotografía acompaña en esos momentos en los cuáles donde el y ella se encuentran solos admirando un espacio, soñando o recordando situaciones en las que se puede determinar claramente la poco relevancia de ellos sobre las vida o sobre las decisiones que ellos mismos toman que van a condicionar su huida de la justicia.

Desde el primer momento, el director no nos plantea la película para que juzguemos a los personajes ni las distintas motivaciones que les llevan a cometer los asesinatos; puesto que muchas veces con un simple plano o un simple gesto, se denota toda la actitud de los protagonistas frente a la vida: el querer ser libre o dejar de ser un mindundi a cualquier precio, porque de algún modo nadie puede ponerse en tu camino o quitarte aquello que uno cree que se merece. También se va a ver a lo largo de la película como van cambiando las tornas, en el caso de Holly que pasa de una actitud infantil a una actitud más racional de las cosas; mientras que en el caso de Kit, será al contrario, el acabará teniendo una actitud más infantil frente a la situación porque prefiere vivir en "su mundo" en lugar de tener que enfrentarse a una realidad.


En definitiva, Terrence Malick despliega en Malas tierras un indudable talante conductista en el filme, una ausencia de cualquier tipo de psicologismo y de sentimentalismo. Contribuye enormemente a afianzar este tono deshumanizado, gélido, el hecho de que las andanzas de los protagonistas están profundamente marcadas por la incomunicación, en sintonía con el temperamento muy poco explícito de la puesta en escena del cineasta. En este sentido, adquieren especial relevancia los casi siempre sencillos y muy adecuados diálogos del filme, que dicen micho más por lo que callan que por lo que verbalizan: por ejemplo la muerte de Cato (amigo de Kit) o la muerte del matrimonio joven.

La incomunicación es algo que también se refleja a lo largo de toda la película, donde incluso Holly comenta que a veces se puede conocer y no conocer a una persona o cuando Kit le confiesa por primera vez que siente la muerte de su padre y que hablarán de ello. Todo esto unido a la voz en off de la protagonista femenina, refleja de algún modo como de frágil es el lenguaje y como se rehuye de él, para no oír la realidad de lo que nos rodea.


Calificación personal: 7.4



El bebé jefazo (2017)





  • Título original: The boss baby
  • Año: 2017
  • Género: Animación
  • Dirección: Tom McGrath
  • Doblaje original: Alec Baldwin, Jimmy Kimmel, Lisa Kudrow, Steve Buscemi, Tobey Maguire, Miles Bakshi, Conrad Vernon.
  • Guión: Michael McCullers
  • Música: Hans Zimmer, Steve Mazzaro
  • Montaje: James Ryan
  • Productora: DreamWorks, 20th Century Fox


SINOPSIS

La llegada de un nuevo hermano, trastoca la vida de Tim, un chico de 7 años que es hijo único y el ojo derecho de sus padres. Su nuevo hermano, es un peculiar bebé que viste con traje y corbata y lleva un maletín. Tim comienza a sospechar de él hasta que descubre, que puede hablar.


CRITICA

Las películas que están destinadas al público infantil se parte con la premisa de que la historia no va a tener sentido o incluso el guión va a ser lo suficientemente malo, como para que un niño no lo entienda y solo pase un momento entretenido. Pero como en alguna ocasión he comentado en las reseñas de las diferentes críticas, este tipo de películas suelen engañar y de vez en cuando, también los adultos disfrutan un buen rato.


La película parte con una premisa sencilla: la llegada de un nuevo miembro a la familia (el bebé) trastoca un poco la vida de los hijos que ya estaban, puesto que el pequeño que llega al hogar requiere más atención y eso, a los hijos mayores no les gusta nada en absoluto. Pero, si además el nuevo miembro viste de forma peculiar y encima sabe hablar, se avecina la catástrofe. Si a todo esto le añadimos que el amor también hay que repartirlo con las mascotas, las cosas se complican aún más. Por lo que los dos protagonistas se juntan para recuperar sus vidas.

Desde el principio se ve como la historia no es para nada enrevesada y como el desarrollo de la misma se ve intercalado con la imaginación del joven Tim a la hora de distraerse, lo que puede evocar en cierto modo esos momentos de la infancia en los cuales todos disfrutábamos y creábamos nuestras propias historias y juegos.


La única pega que es importante reseñar en la película es que al principio plantea la llegada de un nuevo hermano como un problema, más que como una alegría; ya que el hijo mayor se ve privado de "todo el amor y toda la atención que tenía" al tenerlo que repartir. Puede transmitir la idea de que el estar solo es lo mejor y que se puede cometer el error de educar de forma caprichosa al hijo, en lugar de ver que tener un hermano siempre ayuda (menos mal que ese error se va subsanando a lo largo de la película).

Lo bueno con lo que hay que quedarse de la película es que tener un hermano/a (por muy plasta que sea) ayuda a crecer con alguien con el que compartir aventuras y juegos y, a pesar de todas las rencillas, problemas o "pelusillas" que puedan aparecer, siempre se acaba queriendo a tu compañero de juegos.



Calificación personal: 7


viernes, 26 de enero de 2018

Gattaca (1997)



  • Dirección: Andrew Niccol
  • Año: 1997
  • Género: Ciencia Ficción
  • Intérpretes: Ethan Hawke, Uma Thurman, Jude Law, Alan Arkin, Gore Vidal, Loren Dean, Elias Koteas, Xander Berkeley, Blair Underwood
  • Guión: Andrew Niccol
  • Música: Michael Nyman
  • Fotografía: Slamowir Idziak
  • Montaje: Lisa Zeno Churgin
  • Vestuario: Colleen Atwood
  • Productora: Columbia Pictures


SINOPSIS

En un futuro no muy lejano, se dejan de concebir hijos de forma natural y se pasa a concebir hijos mediante una selección genética. Vincent (Ethan Hawke) es uno de los últimos que ha sido concebido de forma natural, pero su delicada salud le impiden acceder a un buen puesto de trabajo y se le cataloga como un inválido. Un día conoce a Jerome (Jude Law) al que le suplantará la identidad para así formar parte de la Corporación Gattaca, que le permitirá cumplir su sueño de viajar a Titán.


CRITICA

Es curioso ver como en el año en el que se estrenó la película, siete años antes se iniciaba en la ciencia el proyecto "Genoma Humano", el cual consistía en determinar toda la secuencia química del ADN desde un punto de vista físico y funcional. Pero, con el paso del tiempo, la ciencia ha ido evolucionando y sentando nuevos protocolos en cuanto a la concepción de los bebés y el uso de células madre para investigar determinadas enfermedades degenerativas; aunque en Gattaca lo que se muestra realmente es la creación de especímenes superiores que sean inmunes a cualquier enfermedad (casi robots) y es algo, que realmente asusta.


Porque, al igual que George Orwell se adelantó en el tiempo con su novela 1984 acerca del control del gobierno sobre ciertos aspectos de nuestra vida, esta película se adelantó también (en cierto modo) a lo que toda pareja le gustaría: tener un hijo sin ningún tipo de deformidad física o no tener ningún problema psicológico. Incluso, se vamos más allá, también es una crítica hacia la sociedad en la cual lo que se busca la excelencia, la perfección o tener todas la titulaciones posibles para ser válido pero, ¿qué pasa realmente con aquellos que no alcanzan esa excelencia, o tienen algún tipo de limitación?, ¿ya no son válidos?, ¿son mediocres?, ¿son un gasto innecesario para la sociedad? En definitiva, somos y seguimos siendo clasistas puesto que quién tiene el poder (en cualquiera de sus formas) parece que puede elegir sobre la vida de los demás.

Por otro lado, también cabe reseñar como se menciona el proceso que se debe seguir para tener un "bebé de diseño": puedes elegir el sexo, color de ojos, eliminar aquellos genes que puedan provocar alguna enfermedad, etc. Es como si se creasen súper humanos relegando la imperfección a un segundo plano. Desde mi punto de vista, realmente esto me produce escalofríos porque al fin y al cabo estas jugando, no sólo a ser Dios, sino a manipular los genes en pro de una súper raza. De hecho, hay un momento en la película, cuando Vincent va a a buscar a Irene a la que le cuenta todo sobre su verdadera identidad y sus defectos, ella le responde: "Entonces, eres un hijo de Dios", es decir, es una forma de señalar que no es un proyecto químico y que nació como fruto del amor y no en una probeta de laboratorio.

También es importante reseñar que el personaje de Irene se dedica a buscar "posibles defectos" de los miembros de Gattaca; pero no solo ella ya que se puede apreciar que una mujer va a que analicen el ADN de un hombre con el que se había besado para ver si era apto genéticamente y no tenía ningún tipo de imperfecciones. Otro contrapunto de la película es el de Jerome, que sigue siendo un "espécimen" válido pero para si mismo no lo es, porque ha perdido todos sus sueños y todas su ilusiones; lo que de alguna forma también nos puede hacer plantearnos que si fracasamos, ¿realmente ya no somos válidos?, ¿no tenemos derecho a tener aspiraciones y metas altas?, ¿somos menos o peores que los demás? La respuesta a todo esto es clara, y es un NO.

El ritmo de la película te atrapa por la estructura forma del guión donde explica con todo detalle el proceso genético y los controles que se utilizan en la Corporación, de esta forma el espectador no se pierde y consigue entender todo el proceso. Y si bien es cierto que la trama no es muy elaborada y la línea argumental no es compleja, permite en cierto modo que el espectador se meta en la historia y elucubre acerca de ella. Me parece interesante que, todo amante de la ciencia ficción vea esta película.


Calificación personal: 7.3



jueves, 25 de enero de 2018

La edad de la inocencia (1993)




  • Título original: The age of innocence
  • Año: 1993
  • Género: Drama
  • Dirección: Martin Scorsese
  • Intérpretes: Daniel Day-Lewis, Michelle Pfeiffer, Winona Ryder, Geraldine Chaplin, Sîan Philips, Stuart Wilson, Alexis Smith, Robert Sean Leonard.
  • Guión: Martin Scorsese, Jay Cocks
  • Música: Elmer Bernstein
  • Fotografía: Florian Ballhaus
  • Montaje: Thelma Schoonmaker
  • Vestuario: Gabriella Pescucci
  • Productora: Columbia Pictures, Sony Entertainment.


SINOPSIS

Nueva York, año 1870. Newland Archer (Daniel Day-Lewis) está prometido con May Welland (Winona Ryder), ambos de la alta sociedad neoyorkina. Los sentimientos de él van cambiando a medida que conoce a la condesa Olenska (Michelle Pfeiffer) que es prima de May.


CRITICA

A menudo, la veneración por un director determinado puede generar cierto resquemor entre sus admiradores. Con esto hago referencia a Martin Scorsese que antes del estreno de esta película, tenía acostumbrado al espectador a películas con cierta violencia como Uno de los nuestros  o Toro salvaje, e incluso la controvertida La última tentación de Cristo, el director sabe sacar un buen partido a una gran historia cuando la tiene bien a mano.

El tema que trata en esta historia es algo habitual que se ha manifestado a lo largo de toda la historia del cine e incluso, antes la literatura también lo había mostrado por medio de grandes novelas donde imperaba una clase social alta y, la doble moral era lo que les hacía destacar.

Con la premisa descrita en el párrafo anterior, se ve como se va desarrollando la historia donde la opulencia, la crítica y la hipocresía era algo muy común y, donde el aparentar y no mostrar ningún tipo de debilidad debía de ser lo más importante. También muestra como una sociedad acepta unas determinadas situaciones, como es el caso del divorcio pero, si se da en su núcleo social y familiar, sería una vergüenza y una deshonra.

El personaje de Newland Archer representa al hombre ideal de aquella época: buena posición social, buena educación, un buen caballero, con buena reputación y discreto pero; a su vez lucha contra todos esos estereotipos sociales que impiden a una persona ser feliz y romper las reglas en favor de su felicidad cuando conoce a la condesa Olenska que vive oprimida bajo el yugo de un marido maltratador (del cual ha huido) y a la vez su propia familia y la sociedad la juzga por intentar tener una segunda oportunidad e incluso ser una mujer independiente. Por eso, ambos se sienten atraídos mutuamente, pero son conscientes no solo de las habladurías (que realmente es lo que menos les importa) sino de lo que tienen en común, que es la joven May. Porque, al fin y al cabo para él, ella representa lo que tanto desearía y viceversa.

Por otra parte, la evolución de los caracteres de los personajes permite mostrar de alguna forma que a pesar de que tengan motivos y deseos para estar juntos, intentan pensar que serían más felices si no estuvieran juntos y que, a pesar de tener pensamientos contradictorios en base a la educación que han recibido, se sienten bajo la influencia de la misma. Lo bueno que también transmite esta historia la obsesión neurótica de ambos por un amor imposible, pero que dentro de esa neurosis el trato entre ellos es puro a la vez que respetuoso y en ningún momento intentan que sea nada indecoroso.


El trío protagonista es insuperable y se refleja una buena química entre ellos. Daniel Day-Lewis es el protagonista pasivo, incapaz de dar el paso con el que liberarse de la sociedad que secretamente desprecia, y poder irse con Ellen, interpretada por Michelle Pfeiffer de manera formidable, contenida y elegante y que lo más seguro, es que sea el mejor papel que haya hecho en su carrera como actriz. Y Winona Ryder, que demostró lo buena actriz que era, interpretando a la mujer tímida y manipuladora que parece incapaz de matar a una mosca y que es la más artera de todos.

Al final, tras poco más de dos horas de intenso metraje, se ve que la película está rodada con agilidad e intensidad, de invisible dinámica y de pasión fervorosa. Ningún amante de Scorsese debería pasar por alto esta película de temática poco habitual, al igual que Silencio. Es una verdadera joya, que permite al espectador mimetizarse con la historia y con los personajes y a la vez, disfrutar de una crítica hacia la hipocresía que se daba en aquella época.


Calificación personal: 8








Rostros (1968)




  • Título original: Faces
  • Año: 1968
  • Género: Drama
  • Dirección: John Cassavetes
  • Intérpretes: John Marley, Gena Rowlands, Lynn Carlin, Fred, Seymour Cassel, Val Avery, Darlene Conley, Dorothy Guillever.
  • Guión: John Cassavetes
  • Música: Jack Ackerman
  • Fotografía: Al Ruban
  • Productora: The Walter Reade Organization.

SINOPSIS

Richard Frost (John Marley) un hombre de negocios de mediana edad conoce a una mujer más joven (Gena Rowlands) y, a la mañana siguiente le pide el divorcio a su mujer. Por otro lado la mujer de Frost (Lynn Carlin) conoce a un chico joven en un bar y pasa la noche con él.


CRITICA

A la hora de ver el cine de John Cassavetes el espectador debe de ir con la mente abierta. No sólo porque es un director que fue el precursor del cine independiente, sino que su fijación por la improvisación puede llevar en determinadas ocasiones a un caos argumental que puede crear cierta confusión, a la vez que cierto rechazo a las películas de este gran director.


Desde el primer minuto de película, la cámara está en continuo movimiento dónde los primeros planos (incluso primerísimos) a modo de falso documental, nos introducen en las emociones de todos los personajes, así como una lucha por parte del sexo masculino para demostrar su masculinidad y, dejando al sexo femenino como el sexo débil y el que debe de satisfacer las apetencias y suplir las carencias que los hombres no son capaces de encontrar en su matrimonio. La importancia de esta película reside en la "empatización" cambiante sobre los diferentes puntos de vista de sus múltiples personajes: maridos, mujeres, amigos, amantes, amados y despreciados; todos ellos enfrentados a una exhaustiva, objetiva y con una comparación emocional de los distintos personajes. En ningún momento, lo que pretende la historia (y por ende su director) es mostrar la belleza de las imágenes o de las formas, sino más bien la exploración anímica de cada individuo por separado, y de su relevancia para con el resto.

Esta caótica trama sitúa al espectador en una posición voyeurista desde el comienzo, de esta forma asiste a los secretos de alcoba sin ningún tipo de censura dialéctica de la clase media-alta estadounidense de aquella época. También, desde la primera escena se muestran diálogos banales entre los hombres y las mujeres pero que, gracias a dichas banalidades, permiten ubicar al espectador en el contexto personal hasta una introspección idiosincrática, así como el análisis de los defectos, los desprecios y los deseos más irrefrenables gracias a la improvisación de sus actores.

También destacan como elementos la pérdida de la juventud, la aceptación de la madurez pero sobre todo, el amor en sus vertientes más pesimistas y explícitas; sobre todo en el personaje interpretado por Gena Rowlands (mujer de John Cassavetes hasta la muerte de él) cuyos sentimientos van cambiando visiblemente a medida que va avanzando la trama. Dónde pasa de ser una mujer usada y sexualizada por su condición, a demostrar que una mujer va mucho más allá y que no tiene que vivir siempre sometida por el yugo de un hombre y que puede actuar de igual forma que él.

Cuando ya termina la película queda una cosa clara con bastante precisión: la complejidad femenina frente a la simplicidad masculina. Así como una cruda soledad (sobre todo interior) en la que se afrontan las malas decisiones con cuestionable entereza, palabras y diálogos pronunciados que quedan en el aire y, como un eco, resuenan en la mente a modo de recordatorio de un error irrevocable dada la imposibilidad de una disculpa que, por haber caído en desuso, ha perdido todo su significado. De esta forma se muestra la parte del amor en sus faceta más oscura y menos edulcorada pero quizás la que más puede asemejarse a lo que puede ocurrir en una relación de verdad. Y sobre todo, se intenta demostrar a través de esta historia la mujer tiene voz y va más allá de ser un simple objeto (como ya he mencionado en párrafos anteriores).


Calificación personal: 7











El libro de la selva 2 (2003)



  • Título original: The jungle book 2
  • Año: 2003
  • Género: Animación
  • Dirección: Steve Trentbirth
  • Doblaje original: Haley Joel Osment, John Goodman, Phil Collins, Mae Whitman, Bob Joles, Tony Jay, Jim Cummings, Pat Fry.
  • Guión: Karl Greus
  • Música: James Horner
  • Productora: Walt Disney Studios, Disney Toon Studios.


SINOPSIS

Mowgli vive en la Aldea del Hombre con su familia adoptiva y la chica que le llevó hasta allí, Shanti. Pero, Mowgli echa de menos la selva y a sus amigos Baloo y Bagheera. Aunque, su deseo de volver permite al tigre Shere Khan vengarse por lo que le hizo el chico.


CRITICA

Como mis lectores más asiduos deben saber, siempre que veo una película (sea buena o mala) hago la crítica. Pero, no solo las hago para mantener actualizado el blog, sino porque a veces viene bien desconectar y ver alguna película que relaje la mente o que incluso nos transporte a una etapa de nuestra vida (especialmente la niñez) para recordar aquellas películas que veíamos.


Si bien que El libro de la selva 2 sigue prácticamente la misma estela que su predecesora estrenada en 1967 pero, que se volvió a estrenar a principios de los años 90, es una forma que tuvo Disney de alguna forma de recaudar dinero y de intentar continuar historias que en un principio se habían cerrado; como pasaría posteriormente al estrenar Peter Pan 2: Regreso al País de Nunca Jamás, La cenicienta 2, 102 dálmatas o incluso Bambi II: El gran príncipe del bosque; si bien sus predecesoras se estrenaron casi cincuenta años antes.

Si bien es cierto que en el año que se estrenó la película, la animación estaba bastante avanzada se ve que la calidad de la misma es pobre al igual que la línea argumental que intenta a toda costa copiar guiños, canciones y situaciones que ya se vivieron en la primera película.

Pero, si bien se sabe que el cine es demasiado caprichoso y que las modas de las secuelas están al alza, la animación no iba a ser menos. A pesar de que su guión sea mediocre, el simple echo de ver la película y, el poder haberme transportado a mi infancia, ha merecido la pena e incluso hacer una pequeña crítica, por muy insulsa que sea.


Calificación personal: 4





miércoles, 24 de enero de 2018

Vidas rebeldes (1961)



  • Título original: The misfits
  • Año: 1961
  • Género: Drama
  • Dirección: John Huston
  • Intérpretes: Clark Gable, Marilyn Monroe, Montgomery Clift, Eli Wallach, Thelma Ritter, Kevin McCarthy.
  • Guión: Arthur Miller
  • Música: Alex North
  • Fotografía: Russell Metty
  • Montaje: George Tomasini
  • Productora: United Artists, Seven Art Productions


SINOPSIS

Rosalyn (Marilyn Monroe) se encuentra en el estado de Nevada tramitando su divorcio. En el transcurso conoce a dos hombres amigos: Gay (Clark Gable) y Guido (Eli Wallach) que se enamoran de ella y, muestran el lado negativo de su personalidad. Después aparece un Pearce (Montgomery Clift), un especialista en rodeos; por el que Rosalyn siente una especial atracción.


CRITICA

La tristeza que embarga desde un primer momento la historia, con una premisa tan sencilla como es un divorcio, también embargaba la vida de aquel "trío" cuyas carreras estaban en el ocaso, marcadas sobre todo por sus tragedias personales; marcando con cierta melancolía el desarrollo de la película y la simbología de los personajes.

Desde un primer momento se nos presentan una serie de personajes cuyas desgracias o problemas, desencadenan un comportamiento iracundo y sin sentimientos, ya que la vida les ha dado tantos palos, que les es imposible recuperarse. Y piensan, que una mujer es la que les va a resolver todos los problemas y cuyo encanto y belleza, es inmune a todos los problemas de los "hombres" y que ellas se deben de conformar con ser amas de casa dedicadas a sus maridos. Pero, no solo son los hombres los que muestran su fragilidad humana, sino también una mujer cuya libertad se ve de nuevo cortada cuando se enamora de un hombre que solo piensa en sí mismo.

Una de las características que más me llamó la atención a la hora de ver la película es como si los actores no estuvieran representando un personaje, sino que estuviesen representando su propia vida  puesto que se sentían bastante desdichados y rotos de dolor. Además, si a todo esto se le une la gran expectación que generó la grabación de esta historia, puesto que para algunos de sus actores fue su triste adiós del mundo del cine y, también de este mundo.

El título original de la película, The misfits se traduciría al castellano como "Los inadaptados", lo que haría honor a la vida de cada personajes: el de Rosalyn (Marilyn Monroe) que tras su divorcio decide ser una mujer independiente pero, a su vez necesita tener un hombre en su vida; Gay (Clark Gable) que al saber que ha fracasado como hombre en el pasado, piensa que no tiene redención y por ello se da a la bebida e intentar llevar una "vida rebelde" apartado del sistema; Perce (Montgomry Clift) que muestra claramente en un fragmento de aproximadamente cinco minutos, que su vida familiar ya no es lo que era, lo que le lleva a estar roto de dolor y, que mejor forma de mitigarlo que compitiendo en rodeos y dándose a la bebida para hacerse inmune a este dolor; y por último Guido (Eli Wallach) que tras la muerte de su mujer se ha insensibilizado ante este acontecimiento y le hace en muchas ocasiones actuar como si no tuviera alma.

Por lo que, a la hora de juntar a estos personajes, forman un cóctel explosivo donde afloran toda serie de sentimientos, desde odio hasta añoranza e incluso, la esperanza por tener una vida mejor y ver que es posible que sus vidas puedan experimentar algún cambio.


Reseñar como parte final de ésta crítica, que el guión fue escrito por Arthur Miller (en 1961 estaba casado con Marilyn Monroe), quién supo hacer daño durante su matrimonio con la actriz despreciándola en todo momento. Por otro lado, Clark Gable murió dos días después de terminar el rodaje (fue su última película) de un infarto al corazón, tras haber rodado la película enfermo y, no haber superado (después de un tiempo) la muerte de su tercera esposa. Marilyn Monroe, murió al año siguiente siendo Vidas rebeldes su última película y, demostró todo su potencial con una gran interpretación, enseñando al mundo su valía y que era más que un cuerpo bonito. Por último, Montgomery Clift que realizaría una de sus últimas películas tras haber sufrido un accidente que le desfiguró la cara (se puede apreciar en la película) y, cuyo abuso de las drogas y el alcohol se ven con frecuencia en los fotogramas de la película.

Para terminar esta crítica, no sólo ver la parte de la "leyenda" que se esconde tras este rodaje sino, ver más allá y entender que hay seres humanos, que tras un acontecimiento que ha marcado profundamente sus vidas, no encuentran de nuevo su lugar en el mundo y creen que no tienen derecho a llevar una vida mejor o incluso poder ser felices; porque piensan que la desgracia es algo que le acompañará durante toda la vida. Además, a esto hay que añadir que en determinados momentos de la película se observa como se sexualiza a la mujer a través del personaje de Rosalyn y que parece, que sólo es un medio para que los hombres mantengan su hombría.



Calificación personal: 7.5



lunes, 22 de enero de 2018

El puente de los espías (2015)





  • Título original: Bridge of spies. 
  • Dirección: Steven Spielberg.
  • Año: 2015.
  • Género: Thriller
  • Intérpretes: Tom Hanks, Alan Alda, Amy Ryan, Mark Rylance, Sebastian Koch, Jesse Plemons, Eve Hewson, Billy Magnussen. 
  • Guion: Matt Charman, Ethan Coen y Joel Coen. 
  • Producción: Kristie Macosko Krieger, Marc Platt y Steven Spielberg. 
  • Música: Thomas Newman. 
  • Fotografía: Janusz Kaminski.
  • Montaje: Michael Kahn
  • Productora: DreamWorks, Fox 2000 Pictures


SINOPSIS

James Donovan (Tom Hanks) es un abogado de Brooklyn que se ve súbitamente inmerso en las entrañas de la Guerra Fría cuando la CIA le envía con el encargo casi imposible de negociar la liberación de un piloto de un avión U-2 estadounidense capturado.


CRITICA

La Guerra Fría supuso un momento importante no solo en la historia de los Estados Unidos, sino también porque en el mundo se había salido recientemente de una Guerra Mundial que había dejado a una Alemania dividida en dos: la fracción comunista (que formaba parte de la antigua URSS) totalmente destruida que se conoció como la RDA y, la que no lo fue conocida como RFA.

Aunque el público está acostumbrado a este tipo de películas con una trama oscura y donde el espionaje es el centro de la historia, en este caso no importa tanto las actividades de espionaje como el hecho de que es lo que ocurría tras el denominado telón de acero y como se libraban los intercambios entre las dos superpotencias más poderosas de aquella época.

Desde el primer momento, se muestran las dos caras de ambos lados: por uno están las ganas de conseguir a sus patriotas prisioneros para evitar que de esta forma liberen secretos de estado y, por el otro que dentro de este conflicto se puede atisbar siempre un poco de humanidad (aunque sea un pequeño resquicio). Se puede decir también que los "duelos" de estas películas no es a nivel armamentístico, sino más bien a nivel de intelecto y de diálogo; produciendo que a lo largo de la película se cree un poco de somnolencia, pero hay que entender que no siempre tiene que haber en una película escenas violentas, que un buen guión tiene cabida para crear una buena historia.

Siguiendo con lo que compete a la historia, muestra también como en muchas de las ocasiones priman más los intereses de un Estado que, intentar salvar la vida de una persona y que, lo más seguro es que lleve una vida un tanto desgraciada porque la vean como un traidor. También refleja de una forma un poco menos sutil, como es necesario dar una imagen de cara a la galería y, tener otra muy distinta de puertas para adentro y que dar seguridad a los ciudadanos, puede provocar a la larga una inseguridad en sus vidas.

Con El puente de los espías, Steven Spielberg vuelve al cine político sólido que le encumbró con grandes películas como La lista de Schindler, sin olvidar que el guión está firmado por los hermanos Coen que (cuando se lo proponen) saben crear historias decentes y que no terminan por adormecer al espectador. También destacar las grandes interpretaciones de Tom Hanks y Mark Rylance donde su compenetración es fabulosa.

Desde mi punto de vista, es una historia real que es necesario conocer no porque sea una película americana, sino para entender un poco el conflicto que se desarrollaba durante la Guerra Fría y como los secretos de Estado son más importantes que la vida humana.




Calificación personal: 6.5



En el nombre del padre (1993)




  • Título original: In the name of the father
  • Año: 1993
  • Género: Drama, autobiográfico
  • Dirección: Jim Sheridan
  • Intérpretes: Daniel Day-Lewis, Emma Thompson, Pete Postlehwaite, John Lynch, Mark Sheppard, Frank Harper, Tom Wilkinson.
  • Guión: Jim Sheridan, Terry George.
  • Música: Trevor Jones
  • Fotografía: Peter Biziou
  • Montaje: Gerry Hambling
  • Productora: Universal Pictures, Hell's Kitchen Pictures.

SINOPSIS

Belfast, años 70. Gerry Conlon (Daniel Day-Lewis) tras un enfrentamiento con el IRA en esta ciudad, decide ir a Londres para tener un vida mejor. Cuando regresa a su casa, es acusado de pertenecer a la banda terrorista y de haber puesto una bomba en un bar. Condenado a cadena perpetua junto a tres amigos y, la encarcelación de su padre, lucha por su liberación para mostrar su inocencia y la de su padre con la ayuda de una abogada (Emma Thompson).


CRITICA

Cuando visiono una película que está basadas en hechos reales, siempre me asalta la duda de si la historia me convencerá o tendrá cierto trasfondo que realmente me haga conocer a ese personaje. Aunque muchas veces, esas historias se tienden a fantasearlas para intentar hacerlas un poco más verosímiles. Pero lo que ocurre con En el nombre del padre es la lucha contra la banda terrorista IRA, que no sólo mataba gente por una Irlanda libre, sino también mandaba gente a prisión por una causa que no les correspondía.

Esta película muestra la historia real de un hombre que fue acusado injustamente por un acto de terrorismo, lo que desembocó también en el encarcelamiento de parte de su familia por delitos que no podían ser demostrados. Puesto que, por aquella época el IRA (por si alguien lo desconoce, era un grupo terrorista que se desarrolló en Irlanda del Norte para echar a los británicos) tenía muchos adeptos por gran parte de Irlanda y de Inglaterra y siempre que tenían oportunidad cometían un atentado. Por su parte, el gobierno británico con tal de parar estos ataque llegaba a utilizar "chusma" irlandesa (como se les definía) como cabezas de turco para limpiar las calles y acusarlos de los crímenes terroristas que cometía la banda.

Lo que se intenta demostrar con esta película, no es sólo el mayor acto de injusticia por parte de la justicia británica sino como muchas con tal de encontrar un culpable, resolver el mayor número de casos o incluso limpiar las calles; se culpa a gente inocente que luego resulta que no es culpable y, en lugar de reconocer el error y dejar a esas personas en libertad, las mantienen presas para que el resto de ciudadanos tome ejemplo de lo que les puede pasar a ellos.

Desde el primer minuto de metraje se muestra al espectador, no solo las injusticias del sistema judicial y las torturas, la situación de una familia que a pesar de su cruda realidad siempre vive con la esperanza de tener fe en que todo se arreglará y que se puede ser una persona honesta aunque se muestre debilidad. Y que también, hay posibilidad de redimirse y de que uno puede volver a acercarse a esas personas de las que se había alejado. Por otro lado se ve la transformación del adolescente inmaduro a un hombre hecho y derecho que no guarda ningún atisbo de rencor y cuya única finalidad es que no se vuelvan a cometer los mismos actos atroces pero sobre todo, poder limpiar el nombre de su padre.


Las interpretaciones no dejan ningún atisbo de duda de la buena química entre Daniel Day-Lewis y Pete Postlehwaite, en donde demuestran que se puede producir de nuevo el acercamiento entre un padre y un hijo, dejar a un lado las diferencias y poder luchar juntos por volver a tener humanidad. Eso se ve sobre todo en un momento de la película (no haré spoiler) en donde el resto de presos de la presión se ponen del lado de Gerry Conlon y él, es capaz de cambiar su actitud. Quizá por eso el final de esta película es algo tan indescriptiblemente liberador, catártico y hermoso. Por que a pesar de constatar de que a veces los buenos triunfan, se constata a través de la mirada y la energía de Gerry Conlon, de que hay cosas que no te pueden arrebatar, de que siempre hay algo indestructible que te anima a continuar cuando todo parece perdido. El hombre común, aunque con sus imperfecciones y su mezquindad, es capaz de recuperar su dignidad y su condición humana.

Es una película que invita a reflexionar desde la bondad a pesar de las atrocidades y que su director, Jim Sheridan, es capaz de mostrar el lado humano y bueno del ser humano que ya hizo anteriormente con su película Mi pie izquierdo y, acabó por conquistar al público con su honesta película En América.


Calificación personal: 8



viernes, 19 de enero de 2018

Amanece en Edimburgo (2013)




  • Título original: Sunshine on Leith. 
  • Dirección: Dexter Fletcher.
  • Año: 2013.
  • Género: Comedia dramática, musical, romance. 
  • Interpretación: George MacKay, Kevin Guthrie, Jane Horrocks, Peter Mullan, Freya Mavor, Antonia Thomas, Jason Flemyng. 
  • Guion: Stephen Greenhorn. 
  • Producción: Andrew Macdonald, Allon Reich, Arabella Page y Kieran Parker. 
  • Música: Paul Englishby. 
  • Fotografía: George Richmond. 
  • Montaje: Stuart Gazzard. 
  • Diseño de producción: Mike Gunn. 
  • Vestuario: Anne Robbins. 
  • Distribuidora: Filmax.


SINOPSIS

Dos buenos amigos, Davy y Ally, quienes vuelven a sus vidas en Edimburgo tras cumplir el servicio en la guerra de Afganistán. Ambos continúan sus relaciones de pareja: Ally con Liz (Freya Mavor) y Davy con Yvonne (Antonia Thomas). Mientras tanto, los padres de Davy, Rab y Jean, están ocupados planeando sus bodas de plata. Todo va bien hasta que una revelación del pasado de Rab amenaza con destruir a la familia y separar a las tres parejas.


CRITICA

El género de los musicales está en auge en los últimos (aproximadamente) unos veinte años y siempre, sobresalen por su sencillez y porque a veces a través de las canciones se puede llegar a transmitir y mostrar valores en actos pequeños. Porque, aunque pueda parecer poco habitual, esta película muestra diferentes valores que son importantes reseñar.

Destacar por ejemplo el enamoramiento como punto de partida del amor, puesto que la energía que despliega el enamoramiento, no se puede considerar todavía un auténtico amor; puesto que es necesario que haya un encuentro personal entre la pareja y tenerse en cuenta el uno al otro y las necesidades que necesitan. Porque cada uno tiene su propio ritmo de maduración e intentar forzar a alguien a que madure o hacer planes sin contar con la otra persona, evitan ese encuentro personal.

Por otro lado, el amor humano es una forma de "encuentro personal". Hay que tener en cuenta que el amor de pareja se da entre dos seres que están dispuestos a comprometerse entre sí. Pero para que se de esa relación de pareja, debe de ser creada esforzadamente a lo largo de toda la vida, porque el amor compromete a toda la persona, no solo a nivel emocional sino también porque hay que respetar el espacio del otro y saber entender las necesidades y complementarte con el otro. Hay que entender una cosa: amar es mucho más que estar enamorado y experimentar toda suerte de sentimientos conmovedores. El amor de pareja debe ser, ante, un auténtico encuentro personal y, como tal, implica una actitud de generosidad incondicional.

Amanece en Edimburgo es una comedia romántica fresca y agradable, que nos permite reflexionar seriamente sobre cómo crear una relación amorosa sólida y como mantenerla en el tiempo a pesar de las dificultades. Además también quiere mostrar que ser fiel significa estar dispuesto a no dejar nunca de crear generosamente el encuentro personal y a reforzar el ámbito de colaboración mutua aunque cambien las circunstancias en que se realiza la promesa, surja, tal vez, una tentación muy viva, la atracción por el ser amado no sea ya tan estimulante o las gratificaciones inmediatas estén prácticamente agotadas.

Algo (que a todo ser humano le cuesta) es el pedir perdón. Pedir perdón implica mostrar arrepentimiento y solicitar una nueva oportunidad de verdadero encuentro; es confiar en el otro, en su magnanimidad y en su categoría humana. Perdonar supone acoger al ofensor con el peso de su culpa, aceptar su arrepentimiento y su determinación de hacerse responsable de las consecuencias de sus actos. Pero cuidado, que perdonar supone volver a empezar como si nada hubiera sucedido, disponerse a cumplir incondicionalmente las exigencias del encuentro. Porque ante todo, aprender a perdonar y a pedir perdón es aprender a vivir una vida auténtica, carente de resentimientos y dotada de grandeza de espíritu.

Hay una parte de la película, en la cual están hablando madre e hija cuando ésta última le pregunta su madre :"pero ¿y si lo que quieres hace daño a otras personas?" y, su madre le contesta: "No puedes decidir pensando en los demás. A la larga, empeoraría las cosas". Es importante tener en cuenta esto, porque no significa ser egoísta sino todo lo contrario porque mientras el otro progresa, tú no lo haces y luego uno se arrepiente y al final los reproches y eso tampoco enriquece ninguna relación.

A pesar de tener un ritmo en la historia bastante lento y no acaba de enganchar bastante al espectador, si que muestra determinados valores que, como ya se han descrito en esta entrada, permiten reflexionar y pensar que a veces para ser mejor, debemos de pensar un poco en nosotros mismos.



Calificación personal: 6