- Título original: Harriet Craig
- Año: 1950
- Género: Drama
- Dirección: Vincent Sherman
- Intérpretes: Joan Crawford, Wendell Corey, Lucile Watson, Allyn Joslyn, William Bishop, K.T. Stevens.
- Guión: Anne Froelich, James Gunn
- Música: George Dunning
- Fotografía: Joseph Walker
- Productora: Columbia Pictures
SINOPSIS
Harriet Craig (Joan Crawford) es una mujer fría y calculadora que vive en su mundo en el que quiere proteger su casa y a su marido (Wendell Corey). Cuando su estabilidad puede verse tambaleada por un cambio en su hogar, decide probar una artimaña para evitar esa situación.
CRITICA
Con el paso del tiempo, cada vez que he visto una película de Joan Crawford me ha producido una cosa: angustia vital. Representa a una mujer perfeccionista, neurótica, con inclinación a la falsedad y a la mentira; creando un mundo que en realidad no existe, provocando que incluso las personas de su alrededor se cuestionen incluso su propia realidad.
La imagen que muestra Harriet (Joan Crawford) es una mujer entregada a su marido y a su casa, por lo que intenta evitar a toda costa que las personas que entran de alguna forma en su vida no alteren mucho su estilo de vida y que no se relacionen con su marido. Por ello, cada vez que encuentra una situación "peculiar", genera una mentira para hacer sentir mal a otras personas y que ella sea la víctima real de todo lo que ocurre.
Generando esta tremenda confusión, Harriet trata mal a aquellos a los que están cerca de ella porque es capaz de pensar de que perderá todos sus privilegios ya que, como ella ha sufrido injurias y una vida penosa junto a su madre, devuelve mal por mal ya que de alguna forma, el mundo le debe un favor.
La historia lleva un ritmo vertiginoso y dinámico, provocando que el espectador no pierda la mirada en Joan Crawford que hace suya la escena y también la propias historia (puesto a que la actriz venía también de un ambiente muy turbio: padre alcohólico, abandono familiar, trabajar en sitios de mala muerte). Además del vestuario. Cuando está sola con su marido, toda su vestimenta es más recatada y, cuando llegan invitados sus vestidos son más llamativos dando a entender que hay libertad en su mundo pero lo disimula con el extremo cuidado en todas y cada una de las habitaciones.
Siempre se comenta que la envidia es muy mala (incluso de una forma muy jocosa) pero, con esta película se muestra en cierto modo, como esa palabra es una verdad absoluta y que destruye todo aquello que toca y lo acaba pudriendo todo.
Calificación personal: 9