- Título original: The tree of life.
- Dirección y guion: Terrence Malick.
- Año: 2011.
- Género:Drama.
- Interpretación: Brad Pitt, Sean Penn , Jessica Chastain, Fiona Shaw , Irene Bedard, Hunter McCracken, Laramie Eppler, Tye Sheridan.
- Producción: Dede Gardner, Sarah Green, Grant Hill, Brad Pitt y William Pohlad.
- Música: Alexandre Desplat.
- Fotografía: Emmanuel Lubezki.
- Montaje: Mark Yoshikawa.
- Diseño de producción: Jack Fisk.
- Vestuario: Jacqueline West.
- Distribuidora: Tripictures.
SINOPSIS
“El árbol de la vida” es un canto a la vida. Busca respuestas a las preguntas más inquietantes, personales y humanas; a través de un caleidoscopio de lo íntimo y lo cósmico, que va de las emociones más descarnadas de una familia de un pequeño pueblo de Texas a los límites infinitos del espacio y del tiempo, de la pérdida de la inocencia de un niño a los encuentros transformadores de un hombre; y lo hace con sobrecogimiento, asombro y trascendencia a través de una historia impresionista de una familia del medio-Oeste americano en los años cincuenta, que sigue el transcurso vital del hijo mayor, Jack, a través de la inocencia de la infancia hasta la desilusión de sus años de madurez, en su intento de reconciliar la complicada relación con su padre (Brad Pitt).
CRITICA
Lo primero que he de decir es que la película me fascinó por completo por el retrato íntimo y personal de cada uno de los personajes (sobre todo el de los niños) y el reflejo de los sentimientos a través de las preguntas que todo ser humano se plantea (de donde venimos, que hay después de la muerte...) por medio de imágenes que a pesar de ser reales son completamente oníricas, y de esta forma hacer una retrospectiva sobre la condición humana.
La controversia que se produjo cuando se estrenó la película, una gran mayoría se preguntaba: "¿qué es lo que realmente ha querido transmitir, a través de dos horas de película donde los diálogos son prácticamente escasos?" La respuesta es muy sencilla: un viaje hacia las emociones personales que las describe de forma metafórica a través de ciertos acontecimientos que han ocurrido desde el principio de los tiempos. De esta forma, lo que pretende también el directo mostrar es reflejar la unión que cada uno de los seres humanos tiene con su entorno no solo en el presente, sino también con nuestro pasado y nuestro futuro.
Esto plantea también el dilema de que el pasado no se puede modificar y no se puede cambiar, pero podemos actuar en el presente para así poder determinar nuestro futuro. Pero, ¿que ocurre cuando nuestro pasado, nuestra infancia acaba repercutiendo en nuestro presente y que condiciona nuestro futuro? No acabamos de disfrutar de la vida y de todo aquello que nos rodea y que en muchos casos (y por desgracia) acabamos siempre quedándonos con los malos recuerdos que acabarán marcando nuestra vida.
Esto se ve bastante bien reflejado en el matrimonio O'Brien, sobre todo en la figura del padre, el cual exige siempre a sus hijos a alcanzar la perfección o incluso está en una crítica constante hacia todo lo que hacen (y todo lo que no hacen). Y a la vez, el padre busca el cariño de sus hijos y el intentar ser cariñoso, pero sus hijos ya no saben como actuar con el. Puesto que el objetivo en el que tiene puestas las esperanzas es que sus hijos sean la perfección personificada y ellos solo quieren ir poco a poco en su infancia y adolescencia. Pero se ve que no son felices salvo cuando están con su madre, que es la que les da ternura y les protege de los arrebatos de su padre.
En toda esta vorágine, se ve como los hijos entran en un estado de rebeldía y de confusión que les irá marcando, sobre todo en el hijo mayor, Jack, que descubre cuando es ya adulto siente de alguna forma el vacío existencial que le ha marcado en la relación con su padre y que no ha conseguido adaptarse a su vida a pesar de todo el éxito conseguido, puesto que lo que realmente ha añorado durante toda su vida es algo que toda persona necesita para crecer: el amor de sus padres para crecer con humanidad.
El árbol de la vida es una película difícil de catalogar, ya que muchos piensan que es difícil catalogarla dentro del género cinematográfico o del arte. Muestra también de alguna forma que los valores aparecen incluso en los dinosaurios, que la belleza va más allá de las cosas o el éxito material, que muchas veces se encuentra en la propia naturaleza y el entorno. También existe un paralelismo entre el camino de la naturaleza y el camino de lo divino, los cuales van cogidos de la mano. Para el director Terrence Malik existe la misma intimidad y belleza desde la creación del universo e incluso en la pérdida de un hijo, en la luz que precede a toda existencia humana e incluso en el primer contacto de un adolescente con la muerte y como le afecta a posteriori.
Desde mi punto de vista, es un canto a la vida, a todo aquello que nos rodea, al mundo, al universo e incluso a Dios, en definitiva a todo aquello que nos permite crecer como seres humanos sabiendo que la bondad siempre está por encima de toda maldad. De ahí la metáfora con un árbol: crece desde algo tan pequeño como una semilla para ser un ser vivo esplendoroso en un entorno donde se puede desechar lo malo.
Calificación personal: 9
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