- Dirección: Icíar Bollaín
- Año: 2003
- Género: Drama
- Intérpretes: Laia Marull, Luis Tosar, Candela Peña, Rosa María Sardá, Sergi Calleja, Kiti Manver, Dave Mooney, Nicolás Fernández Luna, Antonio de la Torre
- Guión: Icíar Bollaín, Alicia Luna
- Música: Alberto Iglesias
- Maquillaje: Ana Ribacoba
- Fotografía: Carles Gusi
- Montaje: Ángel Fernández Zoido
- Productora: La Iguana, Alta Producciones
SINOPSIS
Una noche de invierno, Pilar (Laia Marull) sale huyendo de su casa con su hijo Juan de su marido Antonio (Luis Tosar) con el que lleva nueve años casada y que la maltrata. Antonio no tarda en seguirla para pedirla perdón y que vuelva con él, algo que a Pilar le cuesta mucho aceptar.
CRITICA
Cuando era adolescente, tuve una asignatura optativa que era "procesos de comunicación" y hubo una parte del trimestre que se hablaba de cine y yo, por aquel entonces ya había empezado a descubrir el cine español de la mano de mi madre. Y en una "discusión" yo argumenté que nuestro cine patrio era bueno, que sus películas tenían mensaje, a lo que mi profesora contestó: "el cine español muestra duramente la realidad". Esta pequeña introducción personal que he escrito es porque, nuestro cine cuando pretende ser crítico, lo es sin miramientos y llega a donde el cine americano no llega muchas de las veces. Pero a veces, es necesario mostrar la realidad, porque somos ciudadanos del mundo y no podemos vivir ajenos a lo que ocurre a nuestro alrededor.
Por eso, creo que esta película es necesaria. Hasta la fecha, sólo había visto una película sobre violencia machista que se llamaba Sólo mía, que se centra en la parte del maltrato físico pero; en este filme va a la segunda parte, cuando ya se ha infligido el daño físico y se pasa al psicológico o al "arrepentimiento" para conseguir que la pareja vuelva. Lo que permite que el espectador se plantee varias cuestiones como el porque decide volver con el, si de verdad las terapias contra la ira funcionan, si esa violencia se puede llevar a otros ámbitos. Por otro lado, muestra un fiel reflejo de como viven la mayoría de las mujeres maltratadas: sumisas, amas de casa a tiempo completo, incapaces de poder tener amistades, incapaces también de poder hacer cosas que les gusten, infravaloradas por ellas mismas y que piensen, que son incapaces de poder escapar de esa cárcel porque dependen de su marido para todo.
Por eso, no hay que olvidar que a pesar de estar en una relación de pareja (bien se sea de noviazgo o de matrimonio) nunca el otro es propiedad del otro y nunca se debe ni ser esclavo y sumiso frente a los deseos o apetencias del otro porque la libertad es uno de los aspectos más importantes que tiene el ser humano y porque nunca se es menos que el otro. La gente cambia, pero cuando se es adulto es mucho más complicado cambiar (en cuanto lo que se refiere al carácter) y que a la larga uno puede acabar quedándose solo.
El tema del maltrato hacia la mujer y la desigualdad hacia el sexo femenino es algo que está muy candente hoy en día y un problema al que no se le acaba de poner solución por eso, la igualdad empieza con el respeto. En cuanto haya de éste, el resto de las cosas irán avanzando. Y recuerden, el cine español no es malo sino es un cine al que no se le educa a la gente.
Calificación personal: 8.3
Cuando era adolescente, tuve una asignatura optativa que era "procesos de comunicación" y hubo una parte del trimestre que se hablaba de cine y yo, por aquel entonces ya había empezado a descubrir el cine español de la mano de mi madre. Y en una "discusión" yo argumenté que nuestro cine patrio era bueno, que sus películas tenían mensaje, a lo que mi profesora contestó: "el cine español muestra duramente la realidad". Esta pequeña introducción personal que he escrito es porque, nuestro cine cuando pretende ser crítico, lo es sin miramientos y llega a donde el cine americano no llega muchas de las veces. Pero a veces, es necesario mostrar la realidad, porque somos ciudadanos del mundo y no podemos vivir ajenos a lo que ocurre a nuestro alrededor.
Por eso, creo que esta película es necesaria. Hasta la fecha, sólo había visto una película sobre violencia machista que se llamaba Sólo mía, que se centra en la parte del maltrato físico pero; en este filme va a la segunda parte, cuando ya se ha infligido el daño físico y se pasa al psicológico o al "arrepentimiento" para conseguir que la pareja vuelva. Lo que permite que el espectador se plantee varias cuestiones como el porque decide volver con el, si de verdad las terapias contra la ira funcionan, si esa violencia se puede llevar a otros ámbitos. Por otro lado, muestra un fiel reflejo de como viven la mayoría de las mujeres maltratadas: sumisas, amas de casa a tiempo completo, incapaces de poder tener amistades, incapaces también de poder hacer cosas que les gusten, infravaloradas por ellas mismas y que piensen, que son incapaces de poder escapar de esa cárcel porque dependen de su marido para todo.
Por eso, no hay que olvidar que a pesar de estar en una relación de pareja (bien se sea de noviazgo o de matrimonio) nunca el otro es propiedad del otro y nunca se debe ni ser esclavo y sumiso frente a los deseos o apetencias del otro porque la libertad es uno de los aspectos más importantes que tiene el ser humano y porque nunca se es menos que el otro. La gente cambia, pero cuando se es adulto es mucho más complicado cambiar (en cuanto lo que se refiere al carácter) y que a la larga uno puede acabar quedándose solo.
El tema del maltrato hacia la mujer y la desigualdad hacia el sexo femenino es algo que está muy candente hoy en día y un problema al que no se le acaba de poner solución por eso, la igualdad empieza con el respeto. En cuanto haya de éste, el resto de las cosas irán avanzando. Y recuerden, el cine español no es malo sino es un cine al que no se le educa a la gente.
Calificación personal: 8.3
No hay comentarios:
Publicar un comentario