Love Actually (2003)

• Dirección: Richard Curtis
• Año: 2003
• Género: Comedia romántica
• Intérpretes: Hugh Grant Liam Neeson, Colin Firth, Laura Linney, Emma Thompson, Alan Rickman, Keira Knightley, Marnie McCutcheon, Bill Nighy, Chiwetel Ejiofor, Andrew Lincoln, Rodrigo Santoro, Martin Freeman, Thomas Brodie-Sangter, Lúcia Moniz, Rowan Atkinson.
• Guión:  Richard Curtis
• Música: Craig Armstrong
• Fotografía: Peter Mountain
• Montaje: Nick Moore
• Productora: Studio Canal, DNA Films

SINOPSIS

La vida de diferentes ciudadanos británicos aparece recogida en esta película coral en la cual cuatro semanas antes de Navidad, la vida de cada uno de ellos cambia drásticamente ante las diferentes situaciones que se les presenta en la vida.

CRITICA

Es una de las pocas películas (que yo recuerde) donde se ha reunido un importante elenco de actores británicos, donde se describe para el espectador el tipo de vida de vida que llevan y como se deben enfrentar a la tan ansiada Navidad, donde siempre se ha vendido como una época de regalos, alegría y felicidad pero que en realidad es mucho más que eso, a pesar de que se cuente de una forma con ciertos puntos cómicos.

Lo que se le presenta al espectador son las historias de diferentes personajes que de algún modo están relacionadas entre si. Bien sea por lazos familiares o lazos laborales donde todo no es de color de rosa para al final, mostrando al espectador lo que realmente significa (en cierto modo) el sentido de la Navidad y valorar también las relaciones familiares y poder conservarlas durante mucho tiempo.

En la película hay desde un viudo que tiene que hacerse cargo de su hijastro y como acaba entablando una relación más estrecha con el. Un matrimonio supuestamente feliz en el cual, la mujer se da cuenta de que su marido le es infiel y a pesar de ser unas fechas tan señaladas, ella no puede ocultar su tristeza. El primer ministro británico que se da cuenta que el cargo que ejerce no está exento para que pueda tener una relación. Dos dobles del cine para adultos ven que sus vidas están vacías pero están contentos juntos... En definitiva, un sin fin de historias donde el reflejo de la Navidad es una simple fachada frente a lo que realmente importa, que es la felicidad de cada uno y no tener que estar fingiendo constante ante la familia en unas fiestas donde hay algo más allá que comer o dar regalos.

Por eso, lo que me resulta interesante de la película (aunque la había visto en el año del estreno en el cine) es que la vida de las personas es una auténtica montaña rusa, donde las emociones juegan un papel importante para así poder reflexionar sobre aquello que de verdad importa, pero no solo en las fiestas navideñas, sino también a lo largo de todo el año.

Desde mi punto de vista es una película para disfrutar y relajarse, donde no importa muchas veces lo que piensen los demás, sino lo que realmente cada uno pensemos de nosotros mismos y como queramos vivir nuestra felicidad sin la necesidad de tener que hacerle daño a nadie. Y cómo no, es una película obligada para las fiestas de Navidad.

Calificación personal: 7