Al mal tiempo, buen cine...

Queridos lectores y seguidores:

Me permito escribir una líneas para agradeceros a todos (desde todas las partes del mundo) que visitéis mi blog y todo lo que voy publicando. Ante todo comentar que no estoy licenciada en cinematografía pero, doy gracias por haber asistido a cursos y que mis padres me introdujeran al cine con sólo 8 años.

Por eso os animo que escribáis vuestras opiniones sin vergüenza alguna (¡por eso existe la libertad de expresión!) o sugerir cambios o visionados de películas, ya que se convierte en un feedback donde podemos aprender unos de otros.

Para finalizar, gracias una vez más por vuestro tiempo y dedicárselo a mi blog. ¡Seguid disfrutando del cine!

martes, 4 de agosto de 2015

Doce hombres sin piedad (1957)




  • Título Original: 12 Angry Men
  • Año: 1957
  • Género: Drama
  • Dirección: Sidney Lumet
  • Intérpretes: Henry Fonda, Lee J. Cobb, Ed Begley, Jack Warden, Martin Balsam, John Fiedler, Billy Nelson, John Savoca, Rudy Bond, James Kelly.
  • Guión: Reginald Rose
  • Fotografía: Boris Kauffman
  • Música: Kenyon Hopkins
  • Productora: MGM, Orion Nova Productions

SINOPSIS

Doce miembros de un jurado, tienen que dictaminar que un chico ha matado a su padre. A la hora de concluir el veredicto, uno de ellos dice que es inocente. Lo que parecía un juicio fácil, se acabará convirtiendo en un intento cambio de voto llegando a sacar a la luz sus más dolorosos recuerdos y miedos.


CRITICA

Esta película pone en entredicho el sistema judicial, no sólo el americano, sino a nivel mundial. Planteando de esta manera una cuestión: ¿son realmente culpables todos los reos? o ¿se aplica de verdad la frase: "eres inocente hasta que se demuestre lo contrario"?

Son preguntas morales totalmente válidas, incluso cuando se vislumbran indicios claros de haber cometido una atrocidad. Pero esta historia, nos intenta mostrar que hay que usar el raciocinio antes que los sentimientos, puesto que nos pueden jugar una mala pasada. Es lo que les pasa a 11 de los 12 miembros del jurado que, arrastrados por sus sentimientos, se inclinan hacia la culpabilidad.

Cada uno de los miembros muestra su opinión por la culpabilidad (inclinado por el personaje de Henry Fonda que está sublime) por aquel que piensa que no es culpable. A medida que cada uno de ellos muestra "su verdadera" opinión. El espectador se da cuenta de que los sentimientos personales interfieren en el veredicto, lo que lleva a un trepidante desarrollo de la trama.

En esta película, mi crítica es muy escueta puesto que si sigo escribiendo más, puede que acabe destripando la película y quite el sentido de la misma y no sea una gran obra maestra del siglo XX.



Calificación personal: 9.2




No hay comentarios: