Un buen año (2006)

• Dirección: Ridley Scott.
• Año: 2006.
• Género: Comedia.
• Interpretación: Russell Crowe, Albert Finney, Marion Cotillard, Tom Hollander, Freddie Highmore .
• Guión: Marc Klein; basado en el libro de Peter Mayle "Un año en Provenza".
• Producción: Ridley Scott.
• Música: Marc Streitenfeld.
• Fotografía: Philippe Le Sourd.
• Montaje: Dody Dorn.
• Diseño de producción: Sonja Klaus.
• Vestuario: Catherine Leterrier.

SINOPSIS

Max Skinner (Russell Crowe), un experto en inversiones viaja desde Londres hasta Provenza para vender un pequeño viñedo que ha heredado de un tío, al que estuvo muy unido en su niñez. Lo que no esperaba en absoluto es que éste fuera el punto de partida de un estimulante capítulo de su vida.

CRÍTICA

Típica comedia romántica con toque nostálgicos que nos intenta transportar a la infancia del protagonista y a la Francia Provenzal.
Después de todas las películas dramáticas que se llevan realizando en los últimos años, esta forma parte de esas comedias románticas del montón; en la cual es predecible el final de la película (ya que el propio comienzo de la misma, desvelará su conclusión final). Utilizando términos vinícolas, la película dejará un sabor bastante ácido, produciendo un "vino" que no ha madurado lo suficiente o que simplemente no se tenía que haber producido.

En mi opinión ha sido una pérdida de tiempo la realización de ésta película, tanto a nivel económico como artístico; ya que el talento indiscutible del directo Ridley Scott; hace que de vez en cuando, uno se plantee, si de verdad posee tal talento (ya que en los últimos años lleva realizando algunos fiascos, tanto taquilleros como artísticos); porque desde que rodase Gladiator, su películas han ido decreciendo (excepto American Gangster y Robin Hood).
Además demuestra una vez más, que su actor fetiche es Russell Crowe, que siempre está para sacarle de los apuros fílmicos (cómo se demuestra en esta película); y donde el actor presenta sus pequeñas dotes cómicas (las cuales no le favorecen nada en absoluto), mezcladas con sus dotes dramáticas (que es su gran registro.

En cuanto al resto del reparto, destacar la presencia del incombustible Albert Finney y de la francesa Marion Cotillard, donde demuestra que su calidad interpretativa no está ligada a la belleza.
Lo único que merece la pena en la película, son los estupendos paisajes y la magnífica fotografía de una Francia vinícola.

En conclusión, no es muy recomendable, ya que las expectativas que el espectador posee, se acaban perdiendo a lo largo de la película; ya que al terminar de verla, el espectador no se acordará ni del título de la película.

Calificación personal: 4